[Biblein52weeks-es] Bible in 52 Weeks: John 10-12 Day: 245

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Bible in 52 Weeks:  
John 10:1: DE cierto, de cierto os digo: El que no entra por la puerta en el corral de las ovejas, mas sube por otra parte, el tal es ladr�n y robador.
John 10:2: Mas el que entra por la puerta, el pastor de las ovejas es.
John 10:3: � �ste abre el portero, y las ovejas oyen su voz: y � sus ovejas llama por nombre, y las saca.
John 10:4: Y como ha sacado fuera todas las propias, va delante de ellas; y las ovejas le siguen, porque conocen su voz.
John 10:5: Mas al extra�o no seguir�n, antes huir�n de �l: porque no conocen la voz de los extra�os.
John 10:6: Esta par�bola les dijo Jes�s; mas ellos no entendieron qu� era lo que les dec�a.
John 10:7: Volvi�les, pues, Jes�s � decir: De cierto, de cierto os digo: Yo soy la puerta de las ovejas.
John 10:8: Todos los que antes de m� vinieron, ladrones son y robadores; mas no los oyeron las ovejas.
John 10:9: Yo soy la puerta: el que por m� entrare, ser� salvo; y entrar�, y saldr�, y hallar� pastos.
John 10:10: El ladr�n no viene sino para hurtar, y matar, y destruir: yo he venido para que tengan vida, y para que la tengan en abundancia.
John 10:11: Yo soy el buen pastor: el buen pastor su vida da por las ovejas.
John 10:12: Mas el asalariado, y que no es el pastor, de quien no son propias las ovejas, ve al lobo que viene, y deja las ovejas, y huye, y el lobo las arrebata, y esparce las ovejas.
John 10:13: As� que, el asalariado, huye, porque es asalariado, y no tiene cuidado de las ovejas.
John 10:14: Yo soy el buen pastor; y conozco mis ovejas, y las m�as me conocen.
John 10:15: Como el Padre me conoce, y yo conozco al Padre; y pongo mi vida por las ovejas.
John 10:16: Tambi�n tengo otras ovejas que no son de este redil; aqu�llas tambi�n me conviene traer, y oir�n mi voz; y habr� un reba�o, y un pastor.
John 10:17: Por eso me ama el Padre, porque yo pongo mi vida, para volverla � tomar.
John 10:18: Nadie me la quita, mas yo la pongo de m� mismo. Tengo poder para ponerla, y tengo poder para volverla � tomar. Este mandamiento recib� de mi Padre.  
John 10:19:   Y volvi� � haber disensi�n entre los Jud�os por estas palabras.
John 10:20: Y muchos de ellos dec�an: Demonio tiene, y est� fuera de s�; �para qu� le o�s?
John 10:21: Dec�an otros: Estas palabras no son de endemoniado: �puede el demonio abrir los ojos de los ciegos?  
John 10:22:   Y se hac�a la fiesta de la dedicaci�n en Jerusalem; y era invierno;
John 10:23: Y Jes�s andaba en el templo por el portal de Salom�n.
John 10:24: Y rode�ronle los Jud�os y dij�ronle: �Hasta cu�ndo nos has de turbar el alma? Si t� eres el Cristo, d�noslo abiertamente.
John 10:25: Respondi�les Jes�s: Os lo he dicho, y no cre�is: las obras que yo hago en nombre de mi Padre, ellas dan testimonio de m�;
John 10:26: Mas vosotros no cre�is, porque no sois de mis ovejas, como os he dicho.
John 10:27: Mis ovejas oyen mi voz, y yo las conozco, y me siguen;
John 10:28: Y yo les doy vida eterna y no perecer�n para siempre, ni nadie las arrebatar� de mi mano.
John 10:29: Mi Padre que me las di�, mayor que todos es y nadie las puede arrebatar de la mano de mi Padre.
John 10:30: Yo y el Padre una cosa somos.
John 10:31: Entonces volvieron � tomar piedras los Jud�os para apedrearle.
John 10:32: Respondi�les Jes�s: Muchas buenas obras os he mostrado de mi Padre, �por cu�l obra de esas me apedre�is?
John 10:33: Respondi�ronle los Jud�os, diciendo: Por buena obra no te apedreamos, sino por la blasfemia; y porque t�, siendo hombre, te haces Dios.
John 10:34: Respondi�les Jes�s: �No est� escrito en vuestra ley: Yo dije, Dioses sois?
John 10:35: Si dijo, dioses, � aquellos � los cuales fu� hecha palabra de Dios (y la Escritura no puede ser quebrantada);
John 10:36: �� quien el Padre santific� y envi� al mundo, vosotros dec�s: T� blasfemas, porque dije: Hijo de Dios soy?
John 10:37: Si no hago obras de mi Padre, no me cre�is.
John 10:38: Mas si las hago, aunque � m� no cre�is, creed � las obras; para que conozc�is y cre�is que el Padre est� en m�, y yo en el Padre.  
John 10:39:   Y procuraban otra vez prenderle; mas �l se sali� de sus manos;
John 10:40: Y volvi�se tras el Jord�n, � aquel lugar donde primero hab�a estado bautizando Juan; y est�vose all�.
John 10:41: Y muchos ven�an � �l, y dec�an: Juan, � la verdad, ninguna se�al hizo; mas todo lo que Juan dijo de �ste, era verdad.
John 10:42: Y muchos creyeron all� en �l.   
John 11:1: ESTABA entonces enfermo uno llamado L�zaro, de Bethania, la aldea de Mar�a y de Marta su hermana.
John 11:2: (Y Mar�a, cuyo hermano L�zaro estaba enfermo, era la que ungi� al Se�or con ung�ento, y limpi� sus pies con sus cabellos)
John 11:3: Enviaron, pues, sus hermanas � �l, diciendo: Se�or, he aqu�, el que amas est� enfermo.
John 11:4: Y oy�ndolo Jes�s, dijo: Esta enfermedad no es para muerte, mas por gloria de Dios, para que el Hijo de Dios sea glorificado por ella.
John 11:5: Y amaba Jes�s � Marta, y � su hermana, y � L�zaro.
John 11:6: Como oy� pues que estaba enfermo, qued�se a�n dos d�as en aquel lugar donde estaba.
John 11:7: Luego, despu�s de esto, dijo � los disc�pulos: Vamos � Judea otra vez.
John 11:8: D�cenle los disc�pulos: Rabb�, ahora procuraban los Jud�os apedrearte, �y otra vez vas all�?
John 11:9: Respondi� Jes�s: �No tiene el d�a doce horas? El que anduviere de d�a, no tropieza, porque ve la luz de este mundo.
John 11:10: Mas el que anduviere de noche, tropieza, porque no hay luz en �l.
John 11:11: Dicho esto, d�celes despu�s: L�zaro nuestro amigo duerme; mas voy � despertarle del sue�o.
John 11:12: Dijeron entonces sus disc�pulos: Se�or, si duerme, salvo estar�.
John 11:13: Mas esto dec�a Jes�s de la muerte de �l: y ellos pensaron que hablaba del reposar del sue�o.
John 11:14: Entonces, pues, Jes�s les dijo claramente: L�zaro es muerto;
John 11:15: Y hu�lgome por vosotros, que yo no haya estado all�, para que cre�is: mas vamos � �l.
John 11:16: Dijo entonces Tom�s, el que se dice el D�dimo, � sus condisc�pulos: Vamos tambi�n nosotros, para que muramos con �l.  
John 11:17:   Vino pues Jes�s, y hall� que hab�a ya cuatro d�as que estaba en el sepulcro.
John 11:18: Y Bethania estaba cerca de Jerusalem, como quince estadios;
John 11:19: Y muchos de los Jud�os hab�an venido � Marta y � Mar�a, � consolarlas de su hermano.
John 11:20: Entonces Marta, como oy� que Jes�s ven�a, sali� � encontrarle; mas Mar�a se estuvo en casa.
John 11:21: Y Marta dijo � Jes�s: Se�or, si hubieses estado aqu�, mi hermano no fuera muerto;
John 11:22: Mas tambi�n s� ahora, que todo lo que pidieres de Dios, te dar� Dios.
John 11:23: D�cele Jes�s: Resucitar� tu hermano.
John 11:24: Marta le dice: Yo s� que resucitar� en la resurrecci�n en el d�a postrero.
John 11:25: D�cele Jes�s: Yo soy la resurrecci�n y la vida: el que cree en m�, aunque est� muerto, vivir�.
John 11:26: Y todo aquel que vive y cree en m�, no morir� eternamente. �Crees esto?
John 11:27: D�cele: S� Se�or; yo he cre�do que t� eres el Cristo, el Hijo de Dios, que has venido al mundo.
John 11:28: Y esto dicho, fu�se, y llam� en secreto � Mar�a su hermana, diciendo: El Maestro est� aqu� y te llama.
John 11:29: Ella, como lo oy�, lev�ntase prestamente y viene � �l.
John 11:30: (Que aun no hab�a llegado Jes�s � la aldea, mas estaba en aquel lugar donde Marta le hab�a encontrado.)
John 11:31: Entonces los Jud�os que estaban en casa con ella, y la consolaban, como vieron que Mar�a se hab�a levantado prestamente, y hab�a salido, sigui�ronla, diciendo: Va al sepulcro � llorar all�.
John 11:32: Mas Mar�a, como vino donde estaba Jes�s, vi�ndole, derrib�se � sus pies, dici�ndole: Se�or, si hubieras estado aqu�, no fuera muerto mi hermano.  
John 11:33:   Jes�s entonces, como la vi� llorando, y � los Jud�os que hab�an venido juntamente con ella llorando, se conmovi� en esp�ritu, y turb�se,
John 11:34: Y dijo: �D�nde le pusisteis? D�cenle: Se�or, ven, y ve.
John 11:35: Y llor� Jes�s.
John 11:36: Dijeron entonces los Jud�os: Mirad c�mo le amaba.
John 11:37: Y algunos de ellos dijeron: �No pod�a �ste que abri� los ojos al ciego, hacer que �ste no muriera?
John 11:38: Y Jes�s, conmovi�ndose otra vez en s� mismo, vino al sepulcro. Era una cueva, la cual ten�a una piedra encima.
John 11:39: Dice Jes�s: Quitad la piedra. Marta, la hermana del que se hab�a muerto, le dice: Se�or, hiede ya, que es de cuatro d�as.
John 11:40: Jes�s le dice: �No te he dicho que, si creyeres, ver�s la gloria de Dios?
John 11:41: Entonces quitaron la piedra de donde el muerto hab�a sido puesto. Y Jes�s, alzando los ojos arriba, dijo: Padre, gracias te doy que me has o�do.
John 11:42: Que yo sab�a que siempre me oyes; mas por causa de la compa��a que est� alrededor, lo dije, para que crean que t� me has enviado.
John 11:43: Y habiendo dicho estas cosas, clam� � gran voz: L�zaro, ven fuera.
John 11:44: Y el que hab�a estado muerto, sali�, atadas las manos y los pies con vendas; y su rostro estaba envuelto en un sudario. D�celes Jes�s: Desatadle, y dejadle ir.  
John 11:45:   Entonces muchos de los Jud�os que hab�an venido � Mar�a, y hab�an visto lo que hab�a hecho Jes�s, creyeron en �l.
John 11:46: Mas algunos de ellos fueron � los Fariseos, y dij�ronles lo que Jes�s hab�a hecho.
John 11:47: Entonces los pont�fices y los Fariseos juntaron concilio, y dec�an: �Qu� hacemos? porque este hombre hace muchas se�ales.
John 11:48: Si le dejamos as�, todos creer�n en �l: y vendr�n los Romanos, y quitar�n nuestro lugar y la naci�n.
John 11:49: Y Caif�s, uno de ellos, sumo pont�fice de aquel a�o, les dijo: Vosotros no sab�is nada;
John 11:50: Ni pens�is que nos conviene que un hombre muera por el pueblo, y no que toda la naci�n se pierda.
John 11:51: Mas esto no lo dijo de s� mismo; sino que, como era el sumo pont�fice de aquel a�o, profetiz� que Jes�s hab�a de morir por la naci�n:
John 11:52: Y no solamente por aquella naci�n, mas tambi�n para que juntase en uno los hijos de Dios que estaban derramados.
John 11:53: As� que, desde aquel d�a consultaban juntos de matarle.
John 11:54: Por tanto, Jes�s ya no andaba manifiestamente entre los Jud�os; mas fu�se de all� � la tierra que est� junto al desierto, � una ciudad que se llama Ephraim: y est�base all� con sus disc�pulos
John 11:55: Y la Pascua de los Jud�os estaba cerca: y muchos subieron de aquella tierra � Jerusalem antes de la Pascua, para purificarse;
John 11:56: Y buscaban � Jes�s, y hablaban los unos con los otros estando en el templo. �Qu� os parece, que no vendr� � la fiesta?
John 11:57: Y los pont�fices y los Fariseos hab�an dado mandamiento, que si alguno supiese d�nde estuviera, lo manifestase, para que le prendiesen.   
John 12:1: Y JES�S, seis d�as antes de la Pascua, vino � Bethania, donde estaba L�zaro, que hab�a sido muerto, al cual hab�a resucitado de los muertos.
John 12:2: � hici�ronle all� una cena y Marta serv�a, y L�zaro era uno de los que estaban sentados � la mesa juntamente con �l.
John 12:3: Entonces Mar�a tom� una libra de ung�ento de nardo l�quido de mucho precio, y ungi� los pies de Jes�s, y limpi� sus pies con sus cabellos: y la casa se llen� del olor del ung�ento.
John 12:4: Y dijo uno de sus disc�pulos, Judas Iscariote, hijo de Sim�n, el que le hab�a de entregar:
John 12:5: �Por qu� no se ha vendido este ung�ento por trescientos dineros, y se di� � los pobres?
John 12:6: Mas dijo esto, no por el cuidado que �l ten�a de los pobres: sino porque era ladr�n, y ten�a la bolsa, y tra�a lo que se echaba en ella.
John 12:7: Entonces Jes�s dijo: D�jala; para el d�a de mi sepultura ha guardado esto;
John 12:8: Porque � los pobres siempre los ten�is con vosotros, mas � m� no siempre me ten�is.
John 12:9: Entonces mucha gente de los Jud�os entendi� que �l estaba all�; y vinieron no solamente por causa de Jes�s, mas tambi�n por ver � L�zaro, al cual hab�a resucitado de los muertos.
John 12:10: Consultaron asimismo los pr�ncipes de los sacerdotes, de matar tambi�n � L�zaro;
John 12:11: Porque muchos de los Jud�os iban y cre�an en Jes�s por causa de �l.  
John 12:12:   El siguiente d�a, mucha gente que hab�a venido � la fiesta, como oyeron que Jes�s ven�a � Jerusalem,
John 12:13: Tomaron ramos de palmas, y salieron � recibirle, y clamaban: �Hosanna, Bendito el que viene en el nombre del Se�or, el Rey de Israel!
John 12:14: Y hall� Jes�s un asnillo, y se sent� sobre �l, como est� escrito:
John 12:15: No temas, hija de Si�n: he aqu� tu Rey viene, sentado sobre un pollino de asna.
John 12:16: Estas cosas no las entendieron sus disc�pulos de primero: empero cuando Jes�s fu� glorificado, entonces se acordaron de que estas cosas estaban escritas de �l, y que le hicieron estas cosas.
John 12:17: Y la gente que estaba con �l, daba testimonio de cuando llam� � L�zaro del sepulcro, y le resucit� de los muertos.
John 12:18: Por lo cual tambi�n hab�a venido la gente � recibirle, porque hab�a o�do que �l hab�a hecho esta se�al;
John 12:19: Mas los Fariseos dijeron entre s�: �Veis que nada aprovech�is? he aqu�, el mundo se va tras de �l.  
John 12:20:   Y hab�a ciertos Griegos de los que hab�an subido � adorar en la fiesta:
John 12:21: �stos pues, se llegaron � Felipe, que era de Bethsaida de Galilea, y rog�ronle, diciendo: Se�or, querr�amos ver � Jes�s.
John 12:22: Vino Felipe, y d�jolo � Andr�s: Andr�s entonces, y Felipe, lo dicen � Jes�s.
John 12:23: Entonces Jes�s les respondi�, diciendo: La hora viene en que el Hijo del hombre ha de ser glorificado.
John 12:24: De cierto, de cierto os digo, que si el grano de trigo no cae en la tierra y muere, �l solo queda; mas si muriere, mucho fruto lleva.
John 12:25: El que ama su vida, la perder�; y el que aborrece su vida en este mundo, para vida eterna la guardar�.
John 12:26: Si alguno me sirve, s�game: y donde yo estuviere, all� tambi�n estar� mi servidor. Si alguno me sirviere, mi Padre le honrar�.  
John 12:27:   Ahora est� turbada mi alma; �y qu� dir�? Padre, s�lvame de esta hora. Mas por esto he venido en esta hora.
John 12:28: Padre, glorifica tu nombre. Entonces vino una voz del cielo: Y lo he glorificado, y lo glorificar� otra vez.
John 12:29: Y la gente que estaba presente, y hab�a o�do, dec�a que hab�a sido trueno. Otros dec�an: �ngel le ha hablado.
John 12:30: Respondi� Jes�s, y dijo: No ha venido esta voz por mi causa, mas por causa de vosotros.
John 12:31: Ahora es el juicio de este mundo: ahora el pr�ncipe de este mundo ser� echado fuera.
John 12:32: Y yo, si fuere levantado de la tierra, � todos traer� � m� mismo.
John 12:33: Y esto dec�a dando � entender de qu� muerte hab�a de morir.
John 12:34: Respondi�le la gente: Nosotros hemos o�do de la ley, que el Cristo permanece para siempre: �c�mo pues dices t�: Conviene que el Hijo del hombre sea levantado? �Qui�n es este Hijo del hombre?
John 12:35: Entonces Jes�s les dice: Aun por un poco estar� la luz entre vosotros: andad entre tanto que ten�is luz, porque no os sorprendan las tinieblas; porque el que anda en tinieblas, no sabe d�nde va.
John 12:36: Entre tanto que ten�is la luz, creed en la luz, para que se�is hijos de luz. Estas cosas habl� Jes�s, y fu�se, y escondi�se de ellos.  
John 12:37:   Empero habiendo hecho delante de ellos tantas se�ales, no cre�an en �l.
John 12:38: Para que se cumpliese el dicho que dijo el profeta Isa�as: �Se�or, qui�n ha cre�do � nuestro dicho? �Y el brazo del Se�or, � qui�n es revelado?
John 12:39: Por esto no pod�an creer, porque otra vez dijo Isa�as:
John 12:40: Ceg� los ojos de ellos, y endureci� su coraz�n; Porque no vean con los ojos, y entiendan de coraz�n, Y se conviertan, Y yo los sane.
John 12:41: Estas cosas dijo Isa�as cuando vi� su gloria, y habl� de �l.  
John 12:42:   Con todo eso, aun de los pr�ncipes, muchos creyeron en �l; mas por causa de los Fariseos no lo confesaban, por no ser echados de la sinagoga.
John 12:43: Porque amaban m�s la gloria de los hombres que la gloria de Dios.  
John 12:44:   Mas Jes�s clam� y dijo: El que cree en m�, no cree en m�, sino en el que me envi�;
John 12:45: Y el que me ve, ve al que me envi�.
John 12:46: Yo la luz he venido al mundo, para que todo aquel que cree en m� no permanezca en tinieblas.
John 12:47: Y el que oyere mis palabras, y no las creyere, yo no le juzgo; porque no he venido � juzgar al mundo, sino � salvar al mundo.
John 12:48: El que me desecha, y no recibe mis palabras, tiene quien le juzgue: la palabra que he hablado, ella le juzgar� en el d�a postrero.
John 12:49: Porque yo no he hablado de m� mismo; mas el Padre que me envi�, �l me di� mandamiento de lo que he de decir, y de lo que he de hablar.
John 12:50: Y s� que su mandamiento es vida eterna: as� que, lo que yo hablo, como el Padre me lo ha dicho, as� hablo.   
(SpaRV)


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