[Biblein52weeks-es] Bible in 52 Weeks: Luke 7-8 Day: 154

dailyreading at churchofgodinchristmennonite.net dailyreading at churchofgodinchristmennonite.net
Fri Jun 4 00:00:02 MDT 2021


Bible in 52 Weeks:  
Luke 7:1: Y COMO acab� todas sus palabras oy�ndole el pueblo, entr� en Capernaum.
Luke 7:2: Y el siervo de un centuri�n, al cual ten�a �l en estima, estaba enfermo y � punto de morir.
Luke 7:3: Y como oy� hablar de Jes�s, envi� � �l los ancianos de los Jud�os, rog�ndole que viniese y librase � su siervo.
Luke 7:4: Y viniendo ellos � Jes�s, rog�ronle con diligencia, dici�ndole: Porque es digno de concederle esto;
Luke 7:5: Que ama nuestra naci�n, y �l nos edific� una sinagoga.
Luke 7:6: Y Jes�s fu� con ellos. Mas como ya no estuviesen lejos de su casa, envi� el centuri�n amigos � �l, dici�ndole: Se�or, no te incomodes, que no soy digno que entres debajo de mi tejado;
Luke 7:7: Por lo cual ni aun me tuve por digno de venir � ti; mas di la palabra, y mi siervo ser� sano.
Luke 7:8: Porque tambi�n yo soy hombre puesto en potestad, que tengo debajo de m� soldados; y digo � �ste: Ve, y va; y al otro: Ven, y viene; y � mi siervo: Haz esto, y lo hace.
Luke 7:9: Lo cual oyendo Jes�s, se maravill� de �l, y vuelto, dijo � las gentes que le segu�an: Os digo que ni aun en Israel he hallado tanta fe.
Luke 7:10: Y vueltos � casa los que hab�an sido enviados, hallaron sano al siervo que hab�a estado enfermo.  
Luke 7:11:   Y aconteci� despu�s, que �l iba � la ciudad que se llama Na�n, � iban con �l muchos de sus disc�pulos, y gran compa��a.
Luke 7:12: Y como lleg� cerca de la puerta de la ciudad, he aqu� que sacaban fuera � un difunto, unig�nito de su madre, la cual tambi�n era viuda: y hab�a con ella grande compa��a de la ciudad.
Luke 7:13: Y como el Se�or la vi�, compadeci�se de ella, y le dice: No llores.
Luke 7:14: Y acerc�ndose, toc� el f�retro: y los que lo llevaban, pararon. Y dice: Mancebo, � ti digo, lev�ntate.
Luke 7:15: Entonces se incorpor� el que hab�a muerto, y comenz� � hablar. Y di�le � su madre.
Luke 7:16: Y todos tuvieron miedo, y glorificaban � Dios, diciendo: Que un gran profeta se ha levantado entre nosotros; y que Dios ha visitado � su pueblo.
Luke 7:17: Y sali� esta fama de �l por toda Judea, y por toda la tierra de alrededor.
Luke 7:18: Y sus disc�pulos dieron � Juan las nuevas de todas estas cosas: y llam� Juan � dos de sus disc�pulos,  
Luke 7:19:   Y envi� � Jes�s, diciendo: �Eres t� aqu�l que hab�a de venir, � esperaremos � otro?
Luke 7:20: Y como los hombres vinieron � �l, dijeron: Juan el Bautista nos ha enviado � ti, diciendo: �Eres t� aqu�l que hab�a de venir, � esperaremos � otro?
Luke 7:21: Y en la misma hora san� � muchos de enfermedades y plagas, y de esp�ritus malos; y � muchos ciegos di� la vista.
Luke 7:22: Y respondiendo Jes�s, les dijo: Id, dad las nuevas � Juan de lo que hab�is visto y o�do: que los ciegos ven, los cojos andan, los leprosos son limpiados, los sordos oyen, los muertos resucitan, � los pobres es anunciado el evangelio:
Luke 7:23: Y bienaventurado es el que no fuere escandalizado en m�.
Luke 7:24: Y como se fueron los mensajeros de Juan, comenz� � hablar de Juan � las gentes: �Qu� salisteis � ver al desierto? �una ca�a que es agitada por el viento?
Luke 7:25: Mas �qu� salisteis � ver? �un hombre cubierto de vestidos delicados? He aqu�, los que est�n en vestido precioso, y viven en delicias, en los palacios de los reyes est�n.
Luke 7:26: Mas �qu� salisteis � ver? �un profeta? Tambi�n os digo, y aun m�s que profeta.
Luke 7:27: �ste es de quien est� escrito: He aqu�, env�o mi mensajero delante de tu faz, El cual aparejar� tu camino delante de ti.
Luke 7:28: Porque os digo que entre los nacidos de mujeres, no hay mayor profeta que Juan el Bautista: mas el m�s peque�o en el reino de los cielos es mayor que �l.
Luke 7:29: Y todo el pueblo oy�ndole, y los publicanos, justificaron � Dios, bautiz�ndose con el bautismo de Juan.
Luke 7:30: Mas los Fariseos y los sabios de la ley, desecharon el consejo de Dios contra s� mismos, no siendo bautizados de �l.
Luke 7:31: Y dice el Se�or: �� qui�n, pues, comparar� los hombres de esta generaci�n, y � qu� son semejantes?
Luke 7:32: Semejantes son � los muchachos sentados en la plaza, y que dan voces los unos � los otros, y dicen: Os ta�imos con flautas, y no bailasteis: os endechamos, y no llorasteis.
Luke 7:33: Porque vino Juan el Bautista, que ni com�a pan, ni beb�a vino, y dec�s: Demonio tiene.
Luke 7:34: Vino el Hijo del hombre, que come y bebe, y dec�s: He aqu� un hombre comil�n, y bebedor de vino, amigo de publicanos y de pecadores.
Luke 7:35: Mas la sabidur�a es justificada de todos sus hijos.  
Luke 7:36:   Y le rog� uno de los Fariseos, que comiese con �l. Y entrado en casa del Fariseo, sent�se � la mesa.
Luke 7:37: Y he aqu� una mujer que hab�a sido pecadora en la ciudad, como entendi� que estaba � la mesa en casa de aquel Fariseo, trajo un alabastro de ung�ento,
Luke 7:38: Y estando detr�s � sus pies, comenz� llorando � regar con l�grimas sus pies, y los limpiaba con los cabellos de su cabeza; y besaba sus pies, y los ung�a con el ung�ento.
Luke 7:39: Y como vi� esto el Fariseo que le hab�a convidado, habl� entre s�, diciendo: �ste, si fuera profeta, conocer�a qui�n y cu�l es la mujer que le toca, que es pecadora.
Luke 7:40: Entonces respondiendo Jes�s, le dijo: Sim�n, una cosa tengo que decirte. Y �l dice: Di, Maestro.
Luke 7:41: Un acreedor ten�a dos deudores: el uno le deb�a quinientos denarios, y el otro cincuenta;
Luke 7:42: Y no teniendo ellos de qu� pagar, perdon� � ambos. Di, pues, �cu�l de �stos le amar� m�s?
Luke 7:43: Y respondiendo Sim�n, dijo: Pienso que aqu�l al cual perdon� m�s. Y �l le dijo: Rectamente has juzgado.
Luke 7:44: Y vuelto � la mujer, dijo � Sim�n: �Ves esta mujer? Entr� en tu casa, no diste agua para mis pies; mas �sta ha regado mis pies con l�grimas, y los ha limpiado con los cabellos.
Luke 7:45: No me diste beso, mas �sta, desde que entr�, no ha cesado de besar mis pies.
Luke 7:46: No ungiste mi cabeza con �leo; mas �sta ha ungido con ung�ento mis pies.
Luke 7:47: Por lo cual te digo que sus muchos pecados son perdonados, porque am� mucho; mas al que se perdona poco, poco ama.
Luke 7:48: Y � ella dijo: Los pecados te son perdonados.
Luke 7:49: Y los que estaban juntamente sentados � la mesa, comenzaron � decir entre s�: �Qui�n es �ste, que tambi�n perdona pecados?
Luke 7:50: Y dijo � la mujer: Tu fe te ha salvado, ve en paz.   
Luke 8:1: Y ACONTECI� despu�s, que �l caminaba por todas las ciudades y aldeas, predicando y anunciando el evangelio del reino de Dios, y los doce con �l,
Luke 8:2: Y algunas mujeres que hab�an sido curadas de malos esp�ritus y de enfermedades: Mar�a, que se llamaba Magdalena, de la cual hab�an salido siete demonios,
Luke 8:3: Y Juana, mujer de Chuza, procurador de Herodes, y Susana, y otras muchas que le serv�an de sus haciendas.  
Luke 8:4:   Y como se junt� una grande compa��a, y los que estaban en cada ciudad vinieron � �l, dijo por una par�bola:
Luke 8:5: Uno que sembraba, sali� � sembrar su simiente; y sembrando, una parte cay� junto al camino, y fu� hollada; y las aves del cielo la comieron.
Luke 8:6: Y otra parte cay� sobre la piedra; y nacida, se sec�, porque no ten�a humedad.
Luke 8:7: Y otra parte cay� entre las espinas; y naciendo las espinas juntamente, la ahogaron.
Luke 8:8: Y otra parte cay� en buena tierra, y cuando fu� nacida, llev� fruto � ciento por uno. Diciendo estas cosas clamaba: El que tiene o�dos para o�r, oiga.
Luke 8:9: Y sus disc�pulos le preguntaron, diciendo, qu� era est� par�bola.
Luke 8:10: Y �l dijo: � vosotros es dado conocer los misterios del reino de Dios; mas � los otros por par�bolas, para que viendo no vean, y oyendo no entiendan.
Luke 8:11: Es pues �sta la par�bola: La simiente es la palabra de Dios.
Luke 8:12: Y los de junto al camino, �stos son los que oyen; y luego viene el diablo, y quita la palabra de su coraz�n, porque no crean y se salven.
Luke 8:13: Y los de sobre la piedra, son los que habiendo o�do, reciben la palabra con gozo; mas �stos no tienen ra�ces; que � tiempo creen, y en el tiempo de la tentaci�n se apartan.
Luke 8:14: Y la que cay� entre las espinas, �stos son los que oyeron; mas y�ndose, son ahogados de los cuidados y de las riquezas y de los pasatiempos de la vida, y no llevan fruto.
Luke 8:15: Mas la que en buena tierra, �stos son los que con coraz�n bueno y recto retienen la palabra o�da, y llevan fruto en paciencia.
Luke 8:16: Ninguno que enciende la antorcha la cubre con vasija, � la pone debajo de la cama; mas la pone en un candelero, para que los que entran vean la luz.
Luke 8:17: Porque no hay cosa oculta, que no haya de ser manifestada; ni cosa escondida, que no haya de ser entendida, y de venir � luz.
Luke 8:18: Mirad pues c�mo o�s; porque � cualquiera que tuviere, le ser� dado; y � cualquiera que no tuviere, aun lo que parece tener le ser� quitado.
Luke 8:19: Y vinieron � �l su madre y hermanos; y no pod�an llegar � el por causa de la multitud.
Luke 8:20: Y le fu� dado aviso, diciendo: Tu madre y tus hermanos est�n fuera, que quieren verte.
Luke 8:21: �l entonces respondiendo, les dijo: Mi madre y mis hermanos son los que oyen la palabra de Dios, y la ejecutan.  
Luke 8:22:   Y aconteci� un d�a que �l entr� en un barco con sus disc�pulos, y les dijo: Pasemos � la otra parte del lago. Y partieron.
Luke 8:23: Pero mientras ellos navegaban, �l se durmi�. Y sobrevino una tempestad de viento en el lago; y hench�an de agua, y peligraban.
Luke 8:24: Y lleg�ndose � �l, le despertaron, diciendo: �Maestro, Maestro, que perecemos! Y despertado �l increp� al viento y � la tempestad del agua; y cesaron, y fu� hecha bonanza.
Luke 8:25: Y les dijo: �Qu� es de vuestra fe? Y atemorizados, se maravillaban, diciendo los unos � los otros: �Qui�n es �ste, que aun � los vientos y al agua manda, y le obedecen?
Luke 8:26: Y navegaron � la tierra de los Gadarenos, que est� delante de Galilea.
Luke 8:27: Y saliendo �l � tierra, le vino al encuentro de la ciudad un hombre que ten�a demonios ya de mucho tiempo; y no vest�a vestido, ni estaba en casa, sino por los sepulcros.
Luke 8:28: El cual, como vi� � Jes�s, exclam� y se postr� delante de �l, y dijo � gran voz: �Qu� tengo yo contigo, Jes�s, Hijo del Dios Alt�simo? Ru�gote que no me atormentes.
Luke 8:29: (Porque mandaba al esp�ritu inmundo que saliese del hombre: porque ya de mucho tiempo le arrebataba; y le guardaban preso con cadenas y grillos; mas rompiendo las prisiones, era agitado del demonio por los desiertos.)
Luke 8:30: Y le pregunt� Jes�s, diciendo: �Qu� nombre tienes? Y �l dijo: Legi�n. Porque muchos demonios hab�an entrado en �l.
Luke 8:31: Y le rogaban que no les mandase ir al abismo.
Luke 8:32: Y hab�a all� un hato de muchos puercos que pac�an en el monte; y le rogaron que los dejase entrar en ellos; y los dej�.
Luke 8:33: Y salidos los demonios del hombre, entraron en los puercos; y el hato se arroj� de un despe�adero en el lago, y ahog�se.
Luke 8:34: Y los pastores, como vieron lo que hab�a acontecido, huyeron, y yendo dieron aviso en la ciudad y por las heredades.
Luke 8:35: Y salieron � ver lo que hab�a acontecido; y vinieron � Jes�s, y hallaron sentado al hombre de quien hab�an salido los demonios, vestido, y en su juicio, � los pies de Jes�s; y tuvieron miedo.
Luke 8:36: Y les contaron los que lo hab�an visto, c�mo hab�a sido salvado aquel endemoniado.
Luke 8:37: Entonces toda la multitud de la tierra de los Gadarenos alrededor, le rogaron que se fuese de ellos; porque ten�an gran temor. Y �l, subiendo en el barco, volvi�se.
Luke 8:38: Y aquel hombre, de quien hab�an salido los demonios, le rog� para estar con �l; mas Jes�s le despidi�, diciendo:
Luke 8:39: Vu�lvete � tu casa, y cuenta cu�n grandes cosas ha hecho Dios contigo. Y �l se fu�, publicando por toda la ciudad cu�n grandes cosas hab�a hecho Jes�s con �l.  
Luke 8:40:   Y aconteci� que volviendo Jes�s, recibi�le la gente; porque todos le esperaban.
Luke 8:41: Y he aqu� un var�n, llamado Jairo, y que era pr�ncipe de la sinagoga, vino, y cayendo � los pies de Jes�s, le rogaba que entrase en su casa;
Luke 8:42: Porque ten�a una hija �nica, como de doce a�os, y ella se estaba muriendo. Y yendo, le apretaba la compa��a.
Luke 8:43: Y una mujer, que ten�a flujo de sangre hac�a ya doce a�os, la cual hab�a gastado en m�dicos toda su hacienda, y por ninguno hab�a podido ser curada,
Luke 8:44: Lleg�ndose por las espaldas, toc� el borde de su vestido; y luego se estanc� el flujo de su sangre.
Luke 8:45: Entonces Jes�s dijo: �Qui�n es el que me ha tocado? Y negando todos, dijo Pedro y los que estaban con �l: Maestro, la compa��a te aprieta y oprime, y dices: �Qui�n es el que me ha tocado?
Luke 8:46: Y Jes�s dijo: Me ha tocado alguien; porque yo he conocido que ha salido virtud de m�.
Luke 8:47: Entonces, como la mujer vi� que no se hab�a ocultado, vino temblando, y postr�ndose delante de �l declar�le delante de todo el pueblo la causa por qu� le hab�a tocado, y c�mo luego hab�a sido sana.
Luke 8:48: Y �l dijo: Hija, tu fe te ha salvado: ve en paz.
Luke 8:49: Estando a�n �l hablando, vino uno del pr�ncipe de la sinagoga � decirle: Tu hija es muerta, no des trabajo al Maestro.
Luke 8:50: Y oy�ndolo Jes�s, le respondi�: No temas: cree solamente, y ser� salva.
Luke 8:51: Y entrado en casa, no dej� entrar � nadie consigo, sino � Pedro, y � Jacobo, y � Juan, y al padre y � la madre de la moza.
Luke 8:52: Y lloraban todos, y la pla��an. Y �l dijo: No llor�is; no es muerta, sino que duerme.
Luke 8:53: Y hac�an burla de �l, sabiendo que estaba muerta.
Luke 8:54: Mas �l, tom�ndola de la mano, clam�, diciendo: Muchacha, lev�ntate.
Luke 8:55: Entonces su esp�ritu volvi�, y se levant� luego: y �l mando que le diesen de comer.
Luke 8:56: Y sus padres estaban at�nitos; � los cuales �l mand�, que � nadie dijesen lo que hab�a sido hecho.   
(SpaRV)


Plan designed by http://www.bible-reading.com





More information about the biblein52weeks-es mailing list