[Biblein52weeks-es] Bible in 52 Weeks: Neh 5-9 Day: 339
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Fri Dec 6 00:00:02 MST 2013
Bible in 52 Weeks:
Nehemiah 5:1: ENTONCES fué grande el clamor del pueblo y de sus mujeres contra los JudÃos sus hermanos.
Nehemiah 5:2: Y habÃa quien decÃa: Nosotros, nuestros hijos y nuestras hijas, somos muchos: hemos por tanto tomado grano para comer y vivir.
Nehemiah 5:3: Y habÃa quienes decÃan: Hemos empeñado nuestras tierras, y nuestras viñas, y nuestras casas, para comprar grano en el hambre.
Nehemiah 5:4: Y habÃa quienes decÃan: Hemos tomado prestado dinero para el tributo del rey, sobre nuestras tierras y viñas.
Nehemiah 5:5: Ahora bien, nuestra carne es como la carne de nuestros hermanos, nuestros hijos como sus hijos; y he aquà que nosotros sujetamos nuestros hijos y nuestras hijas á servidumbre, y hay algunas de nuestras hijas sujetas: mas no hay facultad en nuestras manos para rescatarlas, porque nuestras tierras y nuestras viñas son de otros.
Nehemiah 5:6: Y enojéme en gran manera cuando oà su clamor y estas palabras.
Nehemiah 5:7: Medité lo entonces para conmigo, y reprendà á los principales y á los magistrados, y dÃjeles: ¿Tomáis cada uno usura de vuestros hermanos? Y convoqué contra ellos una grande junta.
Nehemiah 5:8: Y dÃjeles: Nosotros rescatamos á nuestros hermanos JudÃos que habÃan sido vendidos á las gentes, conforme á la facultad que habÃa en nosotros: ¿y vosotros aun vendéis á vuestros hermanos, y serán vendidos á nosotros? Y callaron, que no tuvieron qué responder.
Nehemiah 5:9: Y dije: No es bien lo que hacéis, ¿no andaréis en temor de nuestro Dios, por no ser el oprobio de las gentes enemigas nuestras?
Nehemiah 5:10: También yo, y mis hermanos, y mis criados, les hemos prestado dinero y grano: relevémosles ahora de este gravamen.
Nehemiah 5:11: Ruégoos que les devolváis hoy sus tierras, sus viñas, sus olivares, y sus casas, y la centésima parte del dinero y grano, del vino y del aceite que demandáis de ellos.
Nehemiah 5:12: Y dijeron: Devolveremos, y nada les demandaremos; haremos asà como tú dices. Entonces convoqué los sacerdotes, y juramentélos que harÃan conforme á esto.
Nehemiah 5:13: Además sacudà mi vestido, y dije: Asà sacuda Dios de su casa y de su trabajo á todo hombre que no cumpliere esto, y asà sea sacudido y vacÃo. Y respondió toda la congregación: ¡Amén! Y alabaron á Jehová. Y el pueblo hizo conforme á esto.
Nehemiah 5:14: También desde el dÃa que me mandó el rey que fuese gobernador de ellos en la tierra de Judá, desde el año veinte del rey Artajerjes hasta el año treinta y dos, doce años, ni yo ni mis hermanos comimos el pan del gobernador.
Nehemiah 5:15: Mas los primeros gobernadores que fueron antes de mÃ, cargaron al pueblo, y tomaron de ellos por el pan y por el vino sobre cuarenta siclos de plata: á más de esto, sus criados se enseñoreaban sobre el pueblo; pero yo no hice asÃ, á causa del temor de Dios.
Nehemiah 5:16: También en la obra de este muro instauré mi parte, y no compramos heredad: y todos mis criados juntos estaban allà á la obra.
Nehemiah 5:17: Además ciento y cincuenta hombres de los JudÃos y magistrados, y los que venÃan á nosotros de las gentes que están en nuestros contornos, estaban á mi mesa.
Nehemiah 5:18: Y lo que se aderezaba para cada dÃa era un buey, seis ovejas escogidas, y aves también se aparejaban para mÃ, y cada diez dÃas vino en toda abundancia: y con todo esto nunca requerà el pan del gobernador, porque la servidumbre de este pueblo era grave.
Nehemiah 5:19: Acuérdate de mà para bien, Dios mÃo, y de todo lo que hice á este pueblo.
Nehemiah 6:1: Y FUà que habiendo oÃdo Sanballat, y TobÃas, y Gesem el Ãrabe, y los demás nuestros enemigos, que habÃa yo edificado el muro, y que no quedaba en él portillo, (aunque hasta aquel tiempo no habÃa puesto en las puertas las hojas,)
Nehemiah 6:2: Sanballat y Gesem enviaron á decirme: Ven, y compongámonos juntos en alguna de las aldeas en el campo de Ono. Mas ellos habÃan pensado hacerme mal.
Nehemiah 6:3: Y enviéles mensajeros, diciendo: Yo hago una grande obra, y no puedo ir; porque cesarÃa la obra, dejándola yo para ir á vosotros.
Nehemiah 6:4: Y enviaron á mà con el mismo asunto por cuatro veces, y yo les respondà de la misma manera.
Nehemiah 6:5: Envió entonces Sanballat á mà su criado, á decir lo mismo por quinta vez, con una carta abierta en su mano,
Nehemiah 6:6: En la cual estaba escrito: Hase oÃdo entre las gentes, y Gasmu lo dice, que tú y los JudÃos pensáis rebelaros; y que por eso edificas tú el muro, con la mira, según estas palabras, de ser tú su rey;
Nehemiah 6:7: Y que has puesto profetas que prediquen de ti en Jerusalem, diciendo: ¡Rey en Judá! Y ahora serán oÃdas del rey las tales palabras: ven por tanto, y consultemos juntos.
Nehemiah 6:8: Entonces envié yo á decirles: No hay tal cosa como dices, sino que de tu corazón tú lo inventas.
Nehemiah 6:9: Porque todos ellos nos ponÃan miedo, diciendo: Debilitaránse las manos de ellos en la obra, y no será hecha. Esfuerza pues mis manos, oh Dios.
Nehemiah 6:10: Vine luego en secreto á casa de SemaÃas hijo de DelaÃas, hijo de Mehetabeel, porque él estaba encerrado; el cual me dijo: Juntémonos en la casa de Dios dentro del templo, y cerremos las puertas del templo, porque vienen para matarte; sÃ, esta noche vendrán á matarte.
Nehemiah 6:11: Entonces dije: ¿Un hombre como yo ha de huir? ¿y quién, que como yo fuera, entrarÃa al templo para salvar la vida? No entraré.
Nehemiah 6:12: Y entendà que Dios no lo habÃa enviado, sino que hablaba aquella profecÃa contra mÃ, porque TobÃas y Sanballat le habÃan alquilado por salario.
Nehemiah 6:13: Porque sobornado fué para hacerme temer asÃ, y que pecase, y les sirviera de mal nombre con que fuera yo infamado.
Nehemiah 6:14: Acuérdate, Dios mÃo, de TobÃas y de Sanballat, conforme á estas sus obras, y también de NoadÃas profetisa, y de los otros profetas que hacÃan por ponerme miedo.
Nehemiah 6:15: Acabóse pues el muro el veinticinco del mes de Elul, en cincuenta y dos dÃas.
Nehemiah 6:16: Y como lo oyeron todos nuestros enemigos, temieron todas las gentes que estaban en nuestros alrededores, y abatiéronse mucho sus ojos, y conocieron que por nuestro Dios habÃa sido hecha esta obra.
Nehemiah 6:17: Asimismo en aquellos dÃas iban muchas cartas de los principales de Judá á TobÃas, y las de TobÃas venÃan á ellos.
Nehemiah 6:18: Porque muchos en Judá se habÃan conjurado con él, porque era yerno de SechânÃas hijo de Ara; y Johanán su hijo habÃa tomado la hija de Mesullam, hijo de Berechîas.
Nehemiah 6:19: También contaban delante de mà sus buenas obras, y referÃanle mis palabras. Y enviaba TobÃas cartas para atemorizarme.
Nehemiah 7:1: Y LUEGO que el muro fué edificado, y asenté las puertas, y fueron señalados porteros y cantores y Levitas,
Nehemiah 7:2: Mandé á mi hermano Hanani, y á HananÃas, prÃncipe del palacio de Jerusalem, (porque era éste, como varón de verdad y temeroso de Dios, sobre muchos;)
Nehemiah 7:3: Y dÃjeles: No se abran las puertas de Jerusalem hasta que caliente el sol: y aun ellos presentes, cierren las puertas, y atrancad. Y señalé guardas de los moradores de Jerusalem, cada cual en su guardia, y cada uno delante de su casa.
Nehemiah 7:4: Y la ciudad era espaciosa y grande, pero poco pueblo dentro de ella, y no habÃa casas reedificadas.
Nehemiah 7:5: Y puso Dios en mi corazón que juntase los principales, y los magistrados, y el pueblo, para que fuesen empadronados por el orden de sus linajes: y hallé el libro de la genealogÃa de los que habÃan subido antes, y encontré en él escrito:
Nehemiah 7:6: Ãstos son los hijos de la provincia que subieron de la cautividad, de la transmigración que hizo pasar Nabucodonosor rey de Babilonia, y que volvieron á Jerusalem y á Judá cada uno á su ciudad;
Nehemiah 7:7: Los cuales vinieron con Zorobabel, Jesuá, NehemÃas, AzarÃas, RaamÃas, Nahamani, Mardochêo, Bilsán, Misperet, Bigvai, Nehum, Baana. La cuenta de los varones del pueblo de Israel:
Nehemiah 7:8: Los hijos de Paros, dos mil ciento setenta y dos;
Nehemiah 7:9: Los hijos de SephatÃas, trescientos setenta y dos;
Nehemiah 7:10: Los hijos de Ara, seiscientos cincuenta y dos;
Nehemiah 7:11: Los hijos de Pahath-moab, de los hijos de Jesuá y de Joab, dos mil ochocientos dieciocho;
Nehemiah 7:12: Los hijos de Elam, mil doscientos cincuenta y cuatro;
Nehemiah 7:13: Los hijos de Zattu, ochocientos cuarenta y cinco;
Nehemiah 7:14: Los hijos de Zachâi, setecientos y sesenta;
Nehemiah 7:15: Los hijos de Binnui, seiscientos cuarenta y ocho;
Nehemiah 7:16: Los hijos de Bebai, seiscientos veintiocho;
Nehemiah 7:17: Los hijos de Azgad, dos mil seiscientos veintidós;
Nehemiah 7:18: Los hijos de Adonicam, seiscientos sesenta y siete;
Nehemiah 7:19: Los hijos de Bigvai, dos mil sesenta y siete;
Nehemiah 7:20: Los hijos de Addin, seiscientos cincuenta y cinco;
Nehemiah 7:21: Los hijos de Ater, de Ezechîas, noventa y ocho;
Nehemiah 7:22: Los hijos de Hasum, trescientos veintiocho;
Nehemiah 7:23: Los hijos de Besai, trescientos veinticuatro;
Nehemiah 7:24: Los hijos de Hariph, ciento doce;
Nehemiah 7:25: Los hijos de Gabaón, noventa y cinco;
Nehemiah 7:26: Los varones de Beth-lehem y de Netopha, ciento ochenta y ocho;
Nehemiah 7:27: Los varones de Anathoth, ciento veintiocho;
Nehemiah 7:28: Los varones de Beth-azmaveth, cuarenta y dos;
Nehemiah 7:29: Los varones de Chîriath-jearim, Chephira y Beeroth, setecientos cuarenta y tres;
Nehemiah 7:30: Los varones de Ramá y de Gebaa, seiscientos veintiuno;
Nehemiah 7:31: Los varones de Michmas, ciento veintidós;
Nehemiah 7:32: Los varones de Beth-el y de Ai, ciento veintitrés;
Nehemiah 7:33: Los varones de la otra Nebo, cincuenta y dos;
Nehemiah 7:34: Los hijos de la otra Elam, mil doscientos cincuenta y cuatro;
Nehemiah 7:35: Los hijos de Harim, trescientos y veinte;
Nehemiah 7:36: Los hijos de Jericó, trescientos cuarenta y cinco;
Nehemiah 7:37: Los hijos de Lod, de Hadid, y Ono, setecientos veintiuno;
Nehemiah 7:38: Los hijos de Senaa, tres mil novecientos y treinta.
Nehemiah 7:39: Los sacerdotes: los hijos de JedaÃas, de la casa de Jesuá, novecientos setenta y tres;
Nehemiah 7:40: Los hijos de Immer, mil cincuenta y dos;
Nehemiah 7:41: Los hijos de Pashur, mil doscientos cuarenta y siete;
Nehemiah 7:42: Los hijos de Harim, mil diez y siete.
Nehemiah 7:43: Levitas: los hijos de Jesuá, de Cadmiel, de los hijos de OdavÃas, setenta y cuatro.
Nehemiah 7:44: Cantores: los hijos de Asaph, ciento cuarenta y ocho.
Nehemiah 7:45: Porteros: los hijos de Sallum, los hijos de Ater, los hijos de Talmón, los hijos de Accub, los hijos de Hatita, los hijos de Sobai, ciento treinta y ocho.
Nehemiah 7:46: Nethineos: los hijos de Siha, los hijos de Hasupha, los hijos de Thabaoth,
Nehemiah 7:47: Los hijos de Chêros, los hijos de Siaa, los hijos de Phadón,
Nehemiah 7:48: Los hijos de Lebana, los hijos de Hagaba, los hijos de Salmai,
Nehemiah 7:49: Los hijos de Hanán, los hijos de Giddel, los hijos de Gahar,
Nehemiah 7:50: Los hijos de RehaÃa, los hijos de ResÃn, los hijos de Necoda,
Nehemiah 7:51: Los hijos de Gazzam, los hijos de Uzza, los hijos de Phasea,
Nehemiah 7:52: Los hijos de Besai, los hijos de Meunim, los hijos de Nephisesim,
Nehemiah 7:53: Los hijos de Bacbuc, los hijos de Hacupha, los hijos de Harhur,
Nehemiah 7:54: Los hijos de Baslith, los hijos de Mehida, los hijos de Harsa,
Nehemiah 7:55: Los hijos de Barcos, los hijos de SÃsara, los hijos de Tema,
Nehemiah 7:56: Los hijos de NesÃa, los hijos de Hatipha.
Nehemiah 7:57: Los hijos de los siervos de Salomón: los hijos de Sotai, los hijos de Sophereth, los hijos de Perida,
Nehemiah 7:58: Los hijos de Jahala, los hijos de Darcón, los hijos de Giddel,
Nehemiah 7:59: Los hijos de SephatÃas, los hijos de Hattil, los hijos de Pochêreth-hassebaim, los hijos de Amón.
Nehemiah 7:60: Todos los Nethineos, é hijos de los siervos de Salomón, trescientos noventa y dos.
Nehemiah 7:61: Y éstos son los que subieron de Tel-melah, Tel-harsa, Chêrub, Addón, é Immer, los cuales no pudieron mostrar la casa de sus padres, ni su linaje, si eran de Israel:
Nehemiah 7:62: Los hijos de DelaÃa, los hijos de TobÃas, los hijos de Necoda, seiscientos cuarenta y dos.
Nehemiah 7:63: Y de los sacerdotes: los hijos de HabaÃas, los hijos de Cos, los hijos de Barzillai, el cual tomó mujer de las hijas de Barzillai Galaadita, y se llamó del nombre de ellas.
Nehemiah 7:64: Ãstos buscaron su registro de genealogÃas, y no se halló; y fueron echados del sacerdocio.
Nehemiah 7:65: Y dÃjoles el Tirsatha que no comiesen de las cosas más santas, hasta que hubiese sacerdote con Urim y Thummim.
Nehemiah 7:66: La congregación toda junta era de cuarenta y dos mil trescientos y sesenta,
Nehemiah 7:67: Sin sus siervos y siervas, que eran siete mil trescientos treinta y siete; y entre ellos habÃa doscientos cuarenta y cinco cantores y cantoras.
Nehemiah 7:68: Sus caballos, setecientos treinta y seis; sus mulos, doscientos cuarenta y cinco;
Nehemiah 7:69: Camellos, cuatrocientos treinta y cinco; asnos, seis mil setecientos y veinte.
Nehemiah 7:70: Y algunos de los prÃncipes de las familias dieron para la obra. El Tirsatha dió para el tesoro mil dracmas de oro, cincuenta tazones, y quinientas treinta vestiduras sacerdotales.
Nehemiah 7:71: Y de los prÃncipes de las familias dieron para el tesoro de la obra, veinte mil dracmas de oro, y dos mil y doscientas libras de plata.
Nehemiah 7:72: Y lo que dió el resto del pueblo fué veinte mil dracmas de oro, y dos mil libras de plata, y sesenta y siete vestiduras sacerdotales.
Nehemiah 7:73: Y habitaron los sacerdotes y los Levitas, y los porteros, y los cantores, y los del pueblo, y los Nethineos, y todo Israel, en sus ciudades. Y venido el mes séptimo, los hijos de Israel estaban en sus ciudades.
Nehemiah 8:1: Y JUNTÃSE todo el pueblo como un solo hombre en la plaza que está delante de la puerta de las Aguas, y dijeron á Esdras el escriba, que trajese el libro de la ley de Moisés, la cual mandó Jehová á Israel.
Nehemiah 8:2: Y Esdras el sacerdote, trajo la ley delante de la congregación, asà de hombres como de mujeres, y de todo entendido para escuchar, el primer dÃa del mes séptimo.
Nehemiah 8:3: Y leyó en el libro delante de la plaza que está delante de la puerta de las Aguas, desde el alba hasta el medio dÃa, en presencia de hombres y mujeres y entendidos; y los oÃdos de todo el pueblo estaban atentos al libro de la ley.
Nehemiah 8:4: Y Esdras el escriba estaba sobre un púlpito de madera, que habÃan hecho para ello; y junto á él estaban MathithÃas, y Sema, y AnÃas, y UrÃas, é HilcÃas, y MaasÃas, á su mano derecha; y á su mano izquierda, PedaÃa, Misael, y Malchîas, y Hasum, y Hasbedana, ZachârÃas, y Mesullam.
Nehemiah 8:5: Abrió pues Esdras el libro á ojos de todo el pueblo, (porque estaba más alto que todo el pueblo); y como lo abrió, todo el pueblo estuvo atento.
Nehemiah 8:6: Bendijo entonces Esdras á Jehová, Dios grande. Y todo el pueblo respondió, ¡Amén! ¡Amén! alzando sus manos; y humilláronse, y adoraron á Jehová inclinados á tierra.
Nehemiah 8:7: Y Jesuá, y Bani, y SerebÃas, JamÃn, Accub, Sabethai, OdÃas, MaasÃas, Celita, AzarÃas, Jozabed, Hanán, PelaÃa, Levitas, hacÃan entender al pueblo la ley: y el pueblo estaba en su lugar.
Nehemiah 8:8: Y leÃan en el libro de la ley de Dios claramente, y ponÃan el sentido, de modo que entendiesen la lectura.
Nehemiah 8:9: Y NehemÃas el Tirsatha, y el sacerdote Esdras, escriba, y los Levitas que hacÃan entender al pueblo, dijeron á todo el pueblo: DÃa santo es á Jehová nuestro Dios; no os entristezcáis, ni lloréis: porque todo el pueblo lloraba oyendo las palabras de la ley.
Nehemiah 8:10: DÃjoles luego: Id, comed grosuras, y bebed vino dulce, y enviad porciones á los que no tienen prevenido; porque dÃa santo es á nuestro Señor: y no os entristezcáis, porque el gozo de Jehová es vuestra fortaleza.
Nehemiah 8:11: Los Levitas pues, hacÃan callar á todo el pueblo, diciendo: Callad, que es dÃa santo, y no os entristezcáis.
Nehemiah 8:12: Y todo el pueblo se fué á comer y á beber, y á enviar porciones, y á gozar de grande alegrÃa, porque habÃan entendido las palabras que les habÃan enseñado.
Nehemiah 8:13: Y el dÃa siguiente se juntaron los prÃncipes de las familias de todo el pueblo, sacerdotes, y Levitas, á Esdras escriba, para entender las palabras de la ley.
Nehemiah 8:14: Y hallaron escrito en la ley que Jehová habÃa mandado por mano de Moisés, que habitasen los hijos de Israel en cabañas en la solemnidad del mes séptimo;
Nehemiah 8:15: Y que hiciesen saber, y pasar pregón por todas sus ciudades y por Jerusalem, diciendo: Salid al monte, y traed ramos de oliva, y ramos de pino, y ramos de arrayán, y ramos de palmas, y ramos de todo árbol espeso, para hacer cabañas como está escrito.
Nehemiah 8:16: Salió pues el pueblo, y trajeron, é hiciéronse cabañas, cada uno sobre su terrado, y en sus patios, y en los patios de la casa de Dios, y en la plaza de la puerta de las Aguas, y en la plaza de la puerta de Ephraim.
Nehemiah 8:17: Y toda la congregación que volvió de la cautividad hicieron cabañas, y en cabañas habitaron; porque desde los dÃas de Josué hijo de Nun hasta aquel dÃa, no habÃan hecho asà los hijos de Israel. Y hubo alegrÃa muy grande.
Nehemiah 8:18: Y leyó Esdras en el libro de la ley de Dios cada dÃa, desde el primer dÃa hasta el postrero; é hicieron la solemnidad por siete dÃas, y al octavo dÃa congregación, según el rito.
Nehemiah 9:1: Y EL dÃa veinticuatro del mismo mes se juntaron los hijos de Israel en ayuno, y con sacos, y tierra sobre sÃ.
Nehemiah 9:2: Y habÃase ya apartado la simiente de Israel de todos los extranjeros; y estando en pie, confesaron sus pecados, y las iniquidades de sus padres.
Nehemiah 9:3: Y puestos de pie en su lugar, leyeron en el libro de la ley de Jehová su Dios la cuarta parte del dÃa, y la cuarta parte confesaron y adoraron á Jehová su Dios.
Nehemiah 9:4: Levantáronse luego sobre la grada de los Levitas, Jesuá y Bani, Cadmiel, SebanÃas, Bunni, SerebÃas, Bani y Chênani, y clamaron en voz alta á Jehová su Dios.
Nehemiah 9:5: Y dijeron los Levitas, Jesuá y Cadmiel, Bani, HosabnÃas, SerebÃas, OdaÃas, SebanÃas y PethaÃa: Levantaos, bendecid á Jehová vuestro Dios desde el siglo hasta el siglo: y bendigan el nombre tuyo, glorioso y alto sobre toda bendición y alabanza.
Nehemiah 9:6: Tú, oh Jehová, eres solo; tú hiciste los cielos, y los cielos de los cielos, y toda su milicia, la tierra y todo lo que está en ella, los mares y todo lo que hay en ellos; y tú vivificas todas estas cosas, y los ejércitos de los cielos te adoran.
Nehemiah 9:7: Tú, eres oh Jehová, el Dios que escogiste á Abram, y lo sacaste de Ur de los Caldeos, y pusÃstele el nombre Abraham;
Nehemiah 9:8: Y hallaste fiel su corazón delante de ti, é hiciste con él alianza para darle la tierra del Cananeo, del Hetheo, y del Amorreheo, y del Pherezeo, y del Jebuseo, y del Gergeseo, para darla á su simiente: y cumpliste tu palabra, porque eres justo.
Nehemiah 9:9: Y miraste la aflicción de nuestros padres en Egipto, y oÃste el clamor de ellos en el mar Bermejo;
Nehemiah 9:10: Y diste señales y maravillas en Faraón, y en todos sus siervos, y en todo el pueblo de su tierra; porque sabÃas que habÃan hecho soberbiamente contra ellos; é hiciste nombre grande, como este dÃa.
Nehemiah 9:11: Y dividiste la mar delante de ellos y pasaron por medio de ella en seco; y á sus perseguidores echaste en los profundos, como una piedra en grandes aguas.
Nehemiah 9:12: Y con columna de nube los guiaste de dÃa, y con columna de fuego de noche, para alumbrarles el camino por donde habÃan de ir.
Nehemiah 9:13: Y sobre el monte de Sinaà descendiste, y hablaste con ellos desde el cielo, y dÃsteles juicios rectos, leyes verdaderas, y estatutos y mandamientos buenos:
Nehemiah 9:14: Y notificásteles el sábado tuyo santo, y les prescribiste, por mano de Moisés tu siervo, mandamientos y estatutos y ley.
Nehemiah 9:15: Y dÃsteles pan del cielo en su hambre, y en su sed les sacaste aguas de la piedra; y dijÃsteles que entrasen á poseer la tierra, por la cual alzaste tu mano que se la habÃas de dar.
Nehemiah 9:16: Mas ellos y nuestros padres hicieron soberbiamente, y endurecieron su cerviz, y no escucharon tus mandamientos,
Nehemiah 9:17: Y no quisieron oÃr, ni se acordaron de tus maravillas que habÃas hecho con ellos; antes endurecieron su cerviz, y en su rebelión pensaron poner caudillo para volverse á su servidumbre. Tú empero, eres Dios de perdones, clemente y piadoso, tardo para la ira, y de mucha misericordia, que no los dejaste.
Nehemiah 9:18: Además, cuando hicieron para sà becerro de fundición, y dijeron: Ãste es tu Dios que te hizo subir de Egipto; y cometieron grandes abominaciones;
Nehemiah 9:19: Tú, con todo, por tus muchas misericordias no los abandonaste en el desierto: la columna de nube no se apartó de ellos de dÃa, para guiarlos por el camino, ni la columna de fuego de noche, para alumbrarles el camino por el cual habÃan de ir.
Nehemiah 9:20: Y diste tu espÃritu bueno para enseñarlos, y no retiraste tu maná de su boca, y agua les diste en su sed.
Nehemiah 9:21: Y sustentástelos cuarenta años en el desierto; de ninguna cosa tuvieron necesidad: sus vestidos no se envejecieron, ni se hincharon sus pies.
Nehemiah 9:22: Y dÃsteles reinos y pueblos, y los distribuiste por cantones: y poseyeron la tierra de Sehón, y la tierra del rey Hesbón, y la tierra de Og rey de Basán.
Nehemiah 9:23: Y multiplicaste sus hijos como las estrellas del cielo, y metÃstelos en la tierra, de la cual habÃas dicho á sus padres que habÃan de entrar á poseerla.
Nehemiah 9:24: Y los hijos vinieron y poseyeron la tierra, y humillaste delante de ellos á los moradores del paÃs, á los Cananeos, los cuales entregaste en su mano, y á sus reyes, y á los pueblos de la tierra, para que hiciesen de ellos á su voluntad.
Nehemiah 9:25: Y tomaron ciudades fortalecidas, y tierra pingüe, y heredaron casas llenas de todo bien, cisternas hechas, viñas y olivares, y muchos árboles de comer; y comieron, y hartáronse, y engrosáronse, y deleitáronse en tu grande bondad.
Nehemiah 9:26: Empero te irritaron, y rebeláronse contra ti, y echaron tu ley tras sus espaldas, y mataron tus profetas que protestaban contra ellos para convertirlos á ti; é hicieron grandes abominaciones.
Nehemiah 9:27: Y entregástelos en mano de sus enemigos, los cuales los afligieron: y en el tiempo de su tribulación clamaron á ti, y tú desde los cielos los oÃste; y según tus muchas miseraciones les dabas salvadores, que los salvasen de mano de sus enemigos.
Nehemiah 9:28: Mas en teniendo reposo, se volvÃan á hacer lo malo delante de ti; por lo cual los dejaste en mano de sus enemigos, que se enseñorearon de ellos: pero convertidos clamaban otra vez á ti, y tú desde los cielos los oÃas, y según tus miseraciones muchas veces los libraste.
Nehemiah 9:29: Y protestásteles que se volviesen á tu ley; mas ellos hicieron soberbiamente, y no oyeron tus mandamientos, sino que pecaron contra tus juicios, los cuales si el hombre hiciere, en ellos vivirá; y dieron hombro renitente, y endurecieron su cerviz, y no escucharon.
Nehemiah 9:30: Y alargaste sobre ellos muchos años, y protestásteles con tu espÃritu por mano de tus profetas, mas no escucharon; por lo cual los entregaste en mano de los pueblos de la tierra.
Nehemiah 9:31: Empero por tus muchas misericordias no los consumiste, ni los dejaste; porque eres Dios clemente y misericordioso.
Nehemiah 9:32: Ahora pues, Dios nuestro, Dios grande, fuerte, terrible, que guardas el pacto y la misericordia, no sea tenido en poco delante de ti todo el trabajo que nos ha alcanzando á nuestros reyes, á nuestros prÃncipes, á nuestros sacerdotes, y á nuestros profetas, y á nuestros padres, y á todo tu pueblo, desde los dÃas de los reyes de Asiria hasta este dÃa.
Nehemiah 9:33: Tú empero eres justo en todo lo que ha venido sobre nosotros; porque rectamente has hecho, mas nosotros hemos hecho lo malo:
Nehemiah 9:34: Y nuestros reyes, nuestros prÃncipes, nuestros sacerdotes, y nuestros padres, no pusieron por obra tu ley, ni atendieron á tus mandamiento y á tus testimonios, con que les protestabas.
Nehemiah 9:35: Y ellos en su reino y en tu mucho bien que les diste, y en la tierra espaciosa y pingüe que entregaste delante de ellos, no te sirvieron, ni se convirtieron de sus malas obras.
Nehemiah 9:36: He aquà que hoy somos siervos, henos aquÃ, siervos en la tierra que diste á nuestros padres para que comiesen sus fruto y su bien.
Nehemiah 9:37: Y se multiplica su fruto para los reyes que has puesto sobre nosotros por nuestros pecados, quienes se enseñorean sobre nuestros cuerpos, y sobre nuestras bestias, conforme á su voluntad, y estamos en grande angustia.
Nehemiah 9:38: Ã causa pues de todo eso nosotros hacemos fiel alianza, y la escribimos, signada de nuestros prÃncipes, de nuestros Levitas, y de nuestros sacerdotes.
(SpaRV)
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